Cómo conseguir que los clientes pre-reserven su cita regularmente

cliente salón de belleza

Conseguir que un nuevo cliente acuda a tu salón de belleza, o centro de estética, representa la oportunidad de convertirlo en un cliente fiel. Sin embargo, muchos propietarios de negocios centran todo su esfuerzo en conseguir esa primera cita, y se olvidan de la importancia de fidelizar a sus clientes.

Conseguir que los clientes pre-reserven su cita regularmente, y enseñar qué comportamiento te esperas de ellos es extremadamente importante. A pesar de ello, muchas veces nos olvidamos de hacerlo o no sabemos cuándo hablarlo con la persona que acuda a nuestro salón por primera vez. En este artículo te enseñaremos algunos puntos clave, que te ayudarán a fidelizar a los nuevos clientes, y a conseguir que pre-reserven su cita regularmente.

1) El momento oportuno: El momento más oportuno para explicar quién eres, y tu forma de trabajar, es durante la cita y no en la fase de check-out.

La fase de check-out suele ser más rápida; el cliente tiene ganas de dejar el salón lo antes posible, o podría tener otros asuntos de los que ocuparse.

Piensa sólo en el tiempo que tienes a disposición durante una coloración, o mientras estás peinando o cortando el pelo a tu cliente. Ese es el momento durante el cual tendrías que explicarle la filosofía de tu negocio y las ventajas de pre-reservar su próxima cita.

2) Incentivar el buen comportamiento como cliente: En muchos casos, los clientes no pre-reservan otra cita con la excusa de que desconocen el tiempo que tendrán a disposición en las semanas siguientes. Lo único que dicen es: “Llamaré yo cuando lo necesite”.

Educar al nuevo cliente para que su visita al salón se convierta en una costumbre, es una óptima estrategia. El cliente tiene que ser incentivado a hacerlo, por ejemplo, premiándole en el caso pre-reserve su cita y, sobre todo, acuda a la misma.

3) ¿Qué tipo de incentivos puedo ofrecer?: Una buena idea es la de ofrecer un descuento por cada pre-reserva. Otro excelente incentivo que puedes ofrecer es un servicio adicional gratuito (manicura, tratamiento capilar etc.)

Intenta ofrecer diferentes incentivos y mira el resultado. ¿Cuál funciona mejor para tu salón?

4) Penalizar los malos hábitos: Desafortunadamente, hay muchos clientes que con su comportamiento pueden afectar negativamente a tu negocio. Por ejemplo, los que cancelan su cita el mismo día de la reserva, o que directamente no acuden a la misma.

Una forma para evitarlo, es la de penalizar estos malos hábitos. Algunos piden un adelanto del precio del servicio; un porcentaje que el cliente pierde en el momento en que no acude a la cita programada. Esta es una buena estrategia, pero puede resultar peligrosa. El cliente penalizado podría decidir no volver al salón en futuro.

Otra forma de penalizar al cliente, es comunicarle que no podrá reservar otras citas en futuro si no las respeta; sigue siendo una técnica arriesgada, pero “duele menos” que perder dinero.

5) El dialogo con el cliente: A este punto sólo te falta saber cómo puedes comunicar al cliente tu forma de trabajar y lo que te esperas de él. A continuación te proponemos un ejemplo que podrás modificar como más te convenga.

“Me alegro que hayas decidido visitar nuestro salón. Así es como solemos trabajar con nuestros clientes: normalmente reservamos las citas con antelación. Por el tipo de servicio que has requerido, programo una segunda cita cada [dos semanas, dos meses etc.] La idea es la de mantener siempre el mejor de los resultados.

Para los clientes que pre-reservan su cita regularmente ofrecemos también un pequeño incentivo. Lo que te puedo proponer es [un descuento, una manicura gratuita, un tratamiento etc.] Lo importante es acudir a la cita puntual, y no cancelarla.

También te avisaremos un par de días antes para recordártela. ¿Qué te parece? ¿Cuándo podrías volver?”

La idea es que el dialogo sea sencillo, eficaz y enfocado en las ventajas que el cliente puede obtener reservando su cita con antelación.

Como ves conseguir que los clientes pre-reserven su cita depende sólo de ti. ¿Estás listo para aplicar estas técnicas en tu salón?

Compartir